Calefones Solares para Tucuman

Aumenta la Factura de gas y la política se mantiene ausente

Calefón solar

Hace algunos años la Argentina perdió su autoabastecimiento de gas natural, pese a esto, no aparecieron Políticas de Estados para ver cómo paliar esta situación que nos obliga a importar gas a precios exorbitantes. Los aumentos tarifarios fue una necesidad y resulto ser un impuestazo que termina siendo un castigo a las clases más vulnerables de nuestra sociedad sin resolver la problemática de fondo, que es la escasez de gas.

Hace unos meses, y pensando en este problema del gas caro y contaminante, me reuní con un legislador Tucumano con la intención de llevarle dos propuestas para disminuir el consumo de gas hogareño, las cuales son accesibles y ya se utilizan en otras partes del mundo. La primera propuesta, es promulgar una ley que elimine la llama pilotos de los calefones que se comercializan en la provincia, la cual se reemplaza por un encendido electrico que prende la llama del calefón cada vez que abrimos el agua caliente, ya existe una iniciativa similar en el congreso nacional, seguramente durmiendo en algún cajón. Con este cambio estaríamos ahorrando hasta 0,5 metros cúbicos de gas por día y por calefón. La segunda propuesta, es una iniciativa de ley que promueva la instalación domiciliaria de calefones solares en los techos de las casa de familia, osea no usar el gas para todas nuestra necesidades de agua caliente. Esta medida trae aparejado, además del beneficio obvio por una disminución del consumo de gas, la creación de mano de obra en la fabricación e instalación de los calefones. Este proyecto de ley apunta a proveer financiación para que todos puedan comprar su calefón solar mediante créditos blandos, otorgados por las instituciones bancarias y financieras de nuestra provincia.

Esta dos medidas son perfectamente factibles, son fáciles de implementar, y con beneficios innegables a los bolsillos de los usuarios y al medio ambiente.

Es hora que la política trabaje para mejorar la calidad de la vida de la gente con ideas más ingeniosas que un simple impuestazo regresivo, que lo único que logra es hundir más a los que menos tienen.

Ing. Gustavo A. Poch

(Artículo escrito el 26 de Abril del 2014)